La aparición de la madre de Nakamura ha trastornado a Ryôta. Su posición tanto en la clase como en la familia Kasai corre peligro y su exasperación está llegando a un punto crítico.
Rika ha alcanzado el equilibrio mental y ha empezado a tratar a su hijo con respeto, Nakamura le ha arrebatado la popularidad en clase y su irritante madre ahora se compadece de Ryôta.
De repente, un día, se produce un incidente. Para que el mundo vuelva a la “cotidianidad correcta”, Ryôta lleva a cabo un castigo.