Tras sacar de un apuro a los guardianes del camposanto, lord Ainz se enfrenta a las hordas de muertos vivientes invocadas por Khajiit, que junto con Clementine han raptado a Nfirea. En la batalla final, Ainz Ooal Gown y Narberal se repartirán al enemigo. La pléyade tendrá que hacer frente a dos horrendas criaturas invocadas con el poder de la Joya de la Muerte, mientras que Ainz terminará desvelando su verdadera cara a la persona que asesinó a los miembros del equipo en E Rantel. Mientras tanto, Sebas Tian y Shalltear urden un plan para llevar a cabo la misión que su amo les ha impuesto. Para ello contarán con la ayuda de unas acólitas sedientas de sangre.