La conclusión de Vota a Harley. Ha llegado el momento: ¡el día de la votación! ¡La fiesta de la democracia! Como manda la tradición, tanto Harley como su adversario han sacado a relucir sus vergüenzas, ¡y ahora todo depende de los ciudadanos! Seamos honestos: no importa quién gane. Sea cual sea el resultado... ¡igual es buen momento para mudarse!